De castillo en castillo en una ruta cultural con nuestra V-Strom
Si eres un consumado telespectador, reconocerás el éxito continuado de la larga saga de Juego de Tronos por sus intrincados guiones, mezcla de intriga, drama y hechos impredecibles sin héroes ni villanos definidos. Otra de sus claves es su espectacular producción. A sus primeros rodajes en castillos irlandeses, la 5ª temporada ha traspasado el puente levadizo de algunas fortalezas españolas, lo que ha regenerado su interés turístico. Segovia nos ofrece, en un radio de unos 200 km, cinco castillos tan diferentes entre sí para que tracemos de uno a otro una ruta en moto con la Suzuki V-Strom como hilo conductor de nuestro propio“roadmovie”, antes de volver pulsar el mando a distancia.
Segovia vive en la Edad Media una importante actividad ganadera y textil y se convierte en lugar de residencia de la corte de los Trastámara. Conserva intacto un elevado número de edificios románicos, con su simbólico acueducto que data de la Roma Imperial del siglo I. El Alcázar fue levantado sobre roca para un claro fin militar.
Saliendo de Segovia con dirección a Soria, recorremos brevemente un tramo de la N 110. Desviándonos en sentido norte por la SG-V-2221 podemos hacer una parada en Cantimpalos, justificándonos por el renombre de su famoso chorizo –que celebra su feria en abril– y por extensión los productos de la matanza. De vuelta a la rectilínea CL 603 atravesando el valle del río Pirón veremos enseguida el altivo Castillo de Turégano, en cuyo patio de armas se encuentra la Iglesia de San Miguel, por la que conserva esta peculiar configuración iglesia-castillo. Este pueblo se merece que aparquemos la moto cerca de los soportales de su Plaza Mayor y recorramos figones, panaderías y anticuarios si no nos topamos con alguna feria, procesiones o corridas taurinas.
Volviendo de nuevo a la CL 603, nos lleva rumbo noroeste hacia el Castillo de Castilnovo, en Villafranca del Condado. Fue erigido por los Reyes de Aragón y según cuenta la leyenda, tras la muerte de Felipe ‘El Hermoso’, Juana ‘La Loca’ pasó una temporada alojada en él. Posteriormente, perteneció a Don Álvaro de Luna y a los duques de Frías. Su uso es residencial, como denota su aspecto de origen mudéjar.
Siguiendo por la SG 232 alcanzamos Sepúlveda, pueblo de trazado típicamente medieval con su propio castillo del que se conservan restos. Hay que conocer su importante patrimonio histórico-artístico. Partiendo desde la Plaza Mayor, vamos a perdernos caminando por su entramado de callejuelas, de casas de piedra añeja y rojiza, de soportales que protegen asadores donde se rinde verdadero culto al cordero asado e iglesias que han aguantado el desgaste de los años.
Y si el hambre ha llamado ya a nuestros estómagos, un punto de referencia en esta ruta será Adeanueva de la Serrezuela donde encontraremos el hotel ruralka Posada Real Señorío de la Serrezuela. Edificio Señorial del S. XVIII con chimenea y gran calidez en su decoración que nos acogerá para desgustar un buen lechazo en su horno de leña y disfruta de una cata de vinos en la bodega interna que el hotel tiene bajo tierra. Los propietarios del hotel Chus y Mariano, contagian la amabilidad y alegría a cada visitante, disfruta de esta parada con todos los sentidos y si no tienes fuerzas para continuar la ruta, recuerda que disponen de habitaciones acogedoras donde descansar plácidamente.
Ahora tras abandonar la carretera comarcal, vamos a rutear de pueblo en pueblo por estas carreteras de enlace que tanto nos gustan a los moteros, la SG-241 y SG-V-2231, aunque también podemos atravesar el pinar hasta Cantalejo y recorrer los 36 km. en línea recta por la SG-V-2323 SG 205 que nos separan del Castillo de Cuéllar.
El castillo de los duques de Alburquerque es una amalgama de estilos arquitectónicos, del XIII al XVIII, en los que predominan el gótico y el renacentista. A partir del XVI, la fortaleza militar original se va convirtiendo en un suntuoso palacio hasta que los duques se trasladan con la Corte a Madrid. Más tarde, Lord Wellington lo usó como cuartel general y ahora es un centro de enseñanza secundaria.
Continuando por la carretera local SG-342 SG-V-3422 que cruza Arroyo de Cuéllar, Samboal y Navas de Oro, nuestra última parada es el Castillo de Coca. Este castillo del S. XV es algo especial siendo la máxima expresión de arquitectura militar realizada en ladrillo con filigranas de arte mudéjar. Curiosamente siendo una construcción defensiva no se sitúa en el altozano sino en plena población, la antigua Cauca romana, cuna del emperador Teodosio. Se compone de dos recintos cuadrados separados por la liza, estando ambos flanqueados por torres poligonales, en lugar de las habituales rectilíneas o curvas, es por ello por lo que visualmente, además del color rojizo del ladrillo, es un castillo muy singular.
Después de imaginar en cada caso la morada de militares, nobles y reyes, iniciamos la vuelta a casa con un gran conocimiento de la historia de esta provincia.
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