Nos ponemos en marcha para descubrir una provincia sorprendente
Cogemos nuestra V-Strom para adentrarnos en una provincia desconocida pese a su riqueza cultural y patrimonial. Estamos en Castilla y León y vamos a recorrer Palencia en busca de los pueblos con más encanto de la zona.
Iniciamos la ruta desde el hotel ruralka Sanmartina en Becerril de los Campos, una gran opción para alojarnos y dejarnos mimar por Isabel, la propietaria, quien nos mostrará orgullosa todas las estancias de la casona de ladrillo y piedra que con tanto cariño han reformado para que cada huésped se sienta como en casa. Su desayuno casero nos llena de energía y nos disponemos a conocer el arte románico de Palencia, nos esperan, monumentos de los siglos XI y XII que se mantienen en pie a la espera de la llegada de los visitantes para embelesarles con canecilllos decorados y su piedra blanquecina.
La P-921 nos lleva directamente a Ampudia, uno de los pueblos más bonitos de la provincia y ubicado en la comarca de Tierra de Campos. Su casco antiguo ha sido declarado Conjunto Histórico Artístico. La villa medieval tiene mucho atractivo, podemos pasear por sus calles porticadas, donde encontraremos varios monumentos entre los que destacan el Castillo y la muralla en ruinas, la Ermita de la Cruz, la Colegiata de San Miguel, el Monasterio de Nuestra Señora de Alconada y el Convento de San Francisco con su Museo Sacro.
Continuamos nuestra ruta con la V-Strom y la siguiente parada será Dueñas, ubicado en el Pico de El Castillo, tiene un valioso legado histórico en la comarca de El Cerrato y ha sido declarado Conjunto Histórico-Artístico con grandes monumentos que visitar como por ejemplo sus iglesias y monasterios.
Los siguientes puntos en la ruta serán Villalobón y Villamediana. Seguimos por Astudillo y llegamos a Frómista. Este último es de los pueblos más bonitos de Palencia y conocido por su patrimonio monumental, como la Iglesia de Santa María del Castillo, la Iglesia de San Martín de Tous, la Iglesia de San Pedro, la Ermita del Otero y la Venta de Boffard. Obras de gran importancia en un pueblo marcado durante siglos por el Camino de Santiago. Este es un buen momento para probar la gastronomía palentina.
No podemos dejar de probar el guiso más tradicional que son las patatas a la importancia, sus asados de cordero, morcillas de Villada, alubias de Saldaña o cecina de Villarramiel, ¡difícil decisión! para el postre sin duda hay que probar el brazo de San Lorenzo. ¡Todo riquísimo!
La N-980 nos pone de nuevo en ruta hasta Villalcazar de Sirga, ubicado en la zona central de la provincia, también en la comarca de Tierra de Campos, se halla este pueblo perteneciente a la Orden del Temple cuyo patrimonio no tiene nada que envidiar al resto de los pueblos por los que hemos pasado en esta ruta. Damos una vuelta para bajar la comida y por último visitamos Carrión de los Condes.
Se trata de un precioso poblado medieval a orillas del río Carrión, junto al cual se encuentran dos grandes zonas verdes, El Parque de El Plantío y la Zona de la Calzada de Piedra. Destacamos también el Monasterio de Santa Claray las iglesias de San Andrés Apóstol y de Nuestra Señora de Belén.
Aguilar de Campoo es otro de los pueblos bonitos palentinos que se recomienda visitar, pero nos pilla retirado en esta ruta, por lo que lo dejaremos para otra ocasión,
Finalmente llegamos a nuestro alojamiento en Hotel Estrella del Bajo Carrión en Villoldo. Las llanuras y los colores verdes y ocres que nos acompañan hasta la entrada hacen de esta llegada una estampa difícil de olvidar. Su estructura diáfana y con cristaleras combinando con la madera oscura hace que nos hagamos una primera idea de lo que nos espera en nuestra estancia. Exclusividad, cuidado por el detalle y gastronomía de nivel.
En su restaurante encontraremos setas del bosque, pichones de Tierra de Campos, huevos de corral, perdices y codornices de tiro, pimientos de Torquemada…los alimentos especialmente seleccionados para cautivar el paladar de los más exquisitos. ¡Una delicia!
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