¡En este post continuamos con nuestros consejos para viajar por el desierto!

22 Jul 2021

Por sus más de 100 años de historia y su gran palmarés deportivo en el Motocross y los Raids, Suzuki puede presumir de estar especializada tanto en coches como en motocicletas en vehículos para fuera de carretera.  

En el capítulo anterior hablábamos de su época culminante del equipo de raids capitaneada por Gaston Rahier, y los Rallies Paris-Dakar de los años 1988, 89, 90 y 91 en los que tuvieron muchísimo protagonismo. Fruto de la competición Suzuki creó su mítica DR Big caracterizada por su “enorme” monocilíndrico de 800 cc. Su evolución décadas después la tenemos hoy en sus actuales V-Strom, ya con motores de dos cilindros en V a 90 grados aunque fieles a su filosofía y por esta experiencia adquirida en los raids de soluciones fiables y contrastadas. 

La característica de las motos de Trail que más convence a todo aquel que opta por una de ellas, su “secreto” que ha logrado que en la última década sean las motos con las que más nos cruzamos en zonas remotas y viajes de larguísimo recorrido, es su accesibilidad y la fácil adaptación del piloto a su moto. En otras palabras, las motocicletas Trail son las más naturales de conducir si excluimos la comodidad de un scooter o las sencillas Naked. Estas motos se conducen con la espalda erguida lo que nos facilita llevar la cabeza en posición lo más alta posible y con el mayor campo de visión a nuestro alcance, y con una postura de las piernas, además, muy poco flexionadas. La posición de conducción es muy apropiada para nuestros viajes por carretera, por trazado urbano y por pistas no asfaltadas, por las que además podemos también pilotar estas motos completamente de pie. 

En nuestro primer artículo sobre consejos para planificar una ruta por desiertos terminábamos recomendando adaptar el manillar a una conducción tanto de pie como sentados, relacionado al tipo de ruta escogida bien si seguimos una pista marcada y si dificultad, o bien si nos enfrentamos a una conducción donde la “navegación” invite a aumentar la atención, la visión lejos de la moto y nuestra orientación. Por ello nuestro consejo para este tipo de viajes en potenciar la iluminación de nuestra Suzuki. Aunque su óptica halógena es excelente, puede que queramos alargar al máximo las distancias, comenzar muy temprano la jornada o que acabe tarde por lo que es muy recomendable instalar unos faros adicionales. 

El siguiente consejo se centra en la regulación de las suspensiones. Es evidente que no son iguales unas suspensiones en cualquier moto sino que se adaptan a su dinámica, su tipo de uso, el peso y las características de su piloto. Las suspensiones  de la Suzuki V-Strom son completamente regulables en el tren delantero, siendo el trasero igualmente regulable en precarga del muelle y extensión. Otros sistemas más complejos permiten ajustar varios parámetros en las suspensiones como es el ajuste de precarga, rebote y compresión a alta y baja velocidad, además de otros ajustes internos como son la cámara de aire, la densidad del aceite y el revalvulado. Como complemento que podemos considerar instalar para viajar al desierto es un amortiguador de dirección, que aportan más firmeza y un alto grado de seguridad en el pilotaje off road y carretera, evita latigazos atravesando baches o si nos topamos con obstáculos en el camino inesperados, además de permitirnos ir más rápido y seguros en pistas sucias o muy rotas. 

Nuestro siguiente consejo es más general para cualquier viaje, sea más corto, bien planificado o con más ingredientes aventureros como puede ser un viaje al desierto. Hablamos de tu equipaje, de tu ropa y de recambios y accesorios que pueda también necesitar tu motocicleta. La ropa dependerá de los días de duración del viaje y de éstos, los días de tránsito y estancia en las etapas. El consejo del viajero por excelencia es viajar sólo con lo imprescindible y con ropa cómoda y lavable. Para llevarla guardada el accesorio imprescindible es el Top Case, que puede complementarse con maletas laterales si bien éstas hacen la moto algo más torpe. Han de ser maletas estancas y lo que llevemos en su interior ha de ir protegido en bolsas. El conjunto de Top Case y maletas laterales ha de ir acompañado de una maleta sobredepósito que además de ayudarnos a acoplarnos mejor sobre la Suzuki V-Strom, es un complemento sumamente práctico para nuestro equipaje que llevemos más a mano, la documentación, planos o dispositivos electrónicos. 

En cuanto a accesorios, hemos de pensar en lo que podamos necesitar de la mecánica más vulnerable en caso de una rotura inesperada o si sufrimos un percance. En el capítulo anterior ya tratamos los pinchazos, que son en la mayoría de las veces la mayor avería que nos puede surgir. Necesitarás engrasar y tensar la cadena en algún momento también. En caso de caída podemos dañar una maneta o romper alguna zona de la carrocería sin más consecuencias. Si el viaje va a tener mayor duración, nuestro consejo es llevar pastillas de freno, cables de embrague y freno, filtros de aire y aceite, líquido de frenos, bombillas de repuesto,  herramientas, destornilladores y llaves fijas, desmontables, eslabón de cadena de repuesto, una copia de la llave de contacto y una batería o “Power Bank” para cuando necesites corriente eléctrica para tus dispositivos.